Cada cocina regional tiene su propio cocido y es que en cada comarca y en cada aldea añaden sus propios productos autóctonos, marcando así las diferencias gastronómicas.
El cocido gallego tiene como base un sin fin de productos salados y frescos del cerdo, tales como el jamón, el lacón, el tocino, la panceta, las costillas, el espinazo, los chorizos y la cacheira con sus correspondientes orejas y rabo, además de carne de vacuno y ave.
Las verduras que se le añaden al cocido juegan un papel importante dependiendo de la época del año en que nos encontremos como los grelos, berzas, nabizas, repollo o col.
Receta cocido gallego:
La preparación del cocido comienza el día anterior, poniendo a remojo todo el cerdo salado y los garbanzos.
Ingredientes para cuatro personas:
En una cazuela con agua se introduce toda la carne y se pone al fuego a cocer. En olla aparte se cuecen los garbanzos para que no se rompan con agua de la carne. Una vez la carne está ya cocida se añaden las patatas peladas y los grelos limpios.
Servir muy caliente todo junto en una fuente.
El punto para que el cocido sea óptimo deberá tener una cocción lenta y nunca rápida para que cada uno de los productos que hemos añadido suelten sus jugos y se disuelvan muy suavemente, dando como resultado un caldo con mucho sabor.
¡Buen provecho!